El otoño es una estación mágica para celebrar, por sus colores, su peculiar clima y el romanticismo que transmite. Dejamos atrás el calor para entrar en los meses más fríos del año, en una transición única que permite todavía organizar bodas al aire libre y lucir outfits cálidos y sofisticados. Esta época nos evoca una especial paleta de colores que conjuga a la perfección con el paisaje y sus atardeceres únicos. ¿Se avecina boda en otoño y necesitas inspiración para escoger tu traje de novio perfecto? Este post es para ti.
Proveniente de autumnus, cuya raíz latina es augeo, la palabra otoño hace referencia a la llegada de la plenitud. Un significado etimológico que se traduce metafóricamente en equilibrio, harmonía y nuevos comienzos. Se trata concretamente de esa esperada época, a caballo entre el frío incipiente y la calidez que todavía resiste y que da lugar a maravillosas veladas al aire libre, antes de que desciendan las temperaturas y las horas de luz. Preparar una boda en otoño puede convertirla en un evento de cuento, por su maravilloso paisaje, su equilibrado clima y su magia especial…
Dejando a un lado su parte más onírica, el otoño es, a nivel práctico, la estación favorita para muchos novios, pues ellos suelen preferir casarse en una época más fresca, para llevar mejor el tópico de que “el traje suele dar bastante calor”. Lo cierto es que las colecciones actuales contemplan también las bodas en temporadas de clima intermedio, ofreciendo propuestas versátiles, idóneas por su tejido y su color.
Para dar vida a una auténtica boda de otoño, los diferentes elementos que la componen deben ir al unísono y transmitir la verdadera esencia de esta estación. Por deferencia, al ser el primero en llegar al altar, el novio marcará el estilo de la celebración con su indumentaria, por ello, elegir el traje adecuado acorde con la temática será un aspecto primordial. ¡Toma nota!
Tendencias en colores y tejidos para bodas de otoño
El otoño nos regala días en los que la luz natural se vuelve suave y cálida, creando ese ambiente idílico, donde todo parece lucir de un modo especial, incluido tu traje de novio. Son ideales los looks en tonos tierra y arena, así como las paletas en tonos ricos y texturas cremosas.
Los clásicos tonos grises y azul marino son tendencia en esta estación, sin olvidar los diferentes matices de azules, desde los más abiertos a los más oscuros, concretamente los marinos profundos o los grises casi negros, cepillados por cálidos verdes y granates. Combina en un mismo look el gris y el azul marino o incluso el azul grisáceo y apuesta por un traje en gris marengo o azul, sobre todo en bodas de día.
El otoño es el momento idóneo para decantarse por un traje de novio tres piezas, pudiendo así jugar con los complementos y darles protagonismo, pues éstos suelen acaparar la atención dentro del atuendo nupcial. Escoge una corbata ocre o dorada o incluso una en color verde botella y un chaleco en tonos ocres, dorados o naranjas. En cuestión de tejidos, serán perfectos los trajes confeccionados en misturas de lino y lana fresca con aspecto rústico y, para los más atrevidos, las propuestas estampadas con micro diseños en colores cálidos.
Es el turno de la decoración…
Hay tantas ideas geniales para una boda en otoño que no sabríamos cuál elegir. Lo ideal es decantarse por una paleta de colores en concreto y seguir el hilo en toda la decoración. Puedes adornar tu boda combinando el verde y el rosado, dándole un toque algo naíf o incluso mezclar los tonos pasteles con colores de piedras preciosas, como el magenta o el verde esmeralda. Otras opciones populares son las tonalidades naranja, melocotón y ciruela, así como los tonos de morado, gris y azul. Si prefieres conseguir un aire más relajado, elige colores neutrales y decora en tonos cobre, un color básico, pero con un impacto sorprendente.
La decoración de una boda en otoño es versátil y se adapta a cualquier tipo de temática, ya sea informal o elegante, rústica o moderna. Podéis decantaros por un evento en el bosque, una celebración estilo brunch, o una boda en un salón acristalado, para disfrutar del atardecer. Los elementos decorativos en colores ocres y marrones como base serán perfectos, así como todos aquellos que encajen en ambientes rurales, como por ejemplo las vajillas vintage y los muebles de fibras naturales.
Para aportar un toque diferente, incorpora frutas como mandarinas, uvas y las clásicas calabazas a la decoración y complétala con toques de musgo, trigo y hojas secas. Un buen menú con alimentos de temporada le dará a tu boda un toque único y genuino que todos recordarán. ¿Listo para organizar la perfecta boda de otoño?
